El fin de semana pasado, Ford GT ganó las 6 horas de la prestigiada carrera Super Season en Bélgica. Los pilotos Stefan Mucke, Olivier Pla y Billy Johnson, recibieron la bandera cuadriculada en su Ford GT 66. Por su parte, el Ford GT 67 de los británicos Harry Tincknell, Andy Priaulx y el brasileño Tony Kanaan, no terminaron la carrera, debido a que éste salió de la prueba tras un accidente en la peligrosa y famosa curva llamada “Eau Rouge”.
“Fue una carrera extrema para nosotros”, mencionó el jefe del equipo Ford Chip Ganassi Racing Team, George Howard-Chappell. «Lo más importante es que a pesar del accidente Harry está bien. Así mismo, el automóvil mostró ser muy resistente y lo evaluaremos para entender lo que pasó. El equipo GT 66 obtuvo un resultado fabuloso.» Los dos Ford GT iniciaron la carrera GTE Pro, con el primero y segundo lugar, lo que les dio la clasificación. En la primera curva, Tincknell condujo el GT 67 a toda velocidad por fuera de la línea de los demás autos, a lo cual Mucke aprovechó para asumir el liderazgo. En el transcurso de la prueba, los tres primeros se distanciaron del resto de los autos, con Mucke al frente seguido por el Porsche de Gianmaria Bruni y éste, por Tincknell.
Accidente en “Eau Rouge”
Después de aproximadamente una hora de la carrera, Tincknell salió de la pista y golpeó la barrera de neumáticos de la famosa curva «Eau Rouge», considerada por muchos, la más traicionera del automovilismo, combinando zigzagueos con diferentes relieves y alta velocidad. Fue un golpe fuerte, pero Tincknell salió caminando sin necesidad de ayuda. «Manejé como de costumbre, pero cuando salí del centro de la pista, el automóvil golpeó fuertemente en el suelo y no hubo nada que yo pudiera hacer», comentó Tincknell. «Sentí que hubo algún tipo de fallo que el equipo ahora va a investigar. Me quedé un poco adolorido después del impacto, pero el hecho de poder salir caminando, es una prueba de la fuerza del Ford GT».
La oportunidad
Faltando una hora para terminar, Pla disminuyó la distancia con respecto al primer lugar. La entrada del safety car ayudó a reducir esa diferencia y el francés volvió al ataque. En el momento clave de la carrera, rebasó al Porsche 91 en «Eau Rouge» y obtuvo una ventaja, cruzando la línea de llegada 45 minutos después. «Yo sabía que tenía que pasar el Porsche 91 rápidamente para abrir una distancia segura y fue genial haberlo conseguido», dice Pla. «El año pasado fue una temporada difícil para nosotros. Somos rápidos, pero siempre existe algún imprevisto o azar que compromete el resultado. Hoy estamos realmente felices; mis compañeros hicieron un trabajo perfecto, el automóvil estuvo fantástico y espero que continúe así”.