Ernesto Neto, uno de los líderes de la escena del arte contemporáneo brasilero se presenta en la sala Catedral del Faena Art Center. Su nombre inspira reverencias y admiración en todo el mundo. Su raíz está en el estilo “neo-concreto” brasilero, que a fines de los años 50 y principios de la década del ‘60 rechazó las ideas modernistas de la geometría abstracta autónoma.
Es lo que hicieron figuras como Lygia Clarc y Hélio Oiticica, por ejemplo, que querían igualar al arte con los organismos vivos, en una suerte de arquitectura orgánica, e invitar a los espectadores a ser partícipes activos. Neto trabaja con instalaciones que a veces ocupan todo el espacio de la exhibición. Sus materiales preferidos son telas muy delgadas y estirables, en nylon o algodón, que sujetas del techo en largas membranas muy finas crean figuras bien orgánicas. Muchas veces embriaga el espacio con aroma de especias y cuelga formas de hongos gigantescos que las personas pueden tocar y palpar a través de pequeñas aberturas. También suele crear laberintos espaciales que permiten interactuar y vivir una experiencia sensorial. Según el artista, su trabajo es una exploración y representación del cuerpo “desde adentro”. Por eso, sentir, oler y tocar sus obras es tan necesario como importante!