Ubicada en Palermo, en esta vieja casona remodelada, abre sus puertas Casa Cavia, un lugar donde confluyen los más nobles sentidos ofreciendo experiencias únicas.
Libros, flores, perfumes y una cocina que se destacan y se disfrutan como si fueran obras de arte, hacen de este lugar un sitio único con una propuesta fresca y ecléctica. Un espacio donde la rutina se detiene para dar lugar al goce, pero también a la reflexión. La florería de Casa Cavia tiene como anfitriona a Silvina Grosso, quien con su propuesta nos invita a regalarnos un lujo cotidiano, mezclando los secretos florales de Buenos Aires con los de los sitios más recónditos que visitó Silvina.
Lupe Garcia Mosqueda remix
La directora creativa de Casa Cavia, Lupe García Mosqueda se somete al cuestionario remix.
Apodo o nombre artístico?
Lupe García.
Cuándo y dónde naciste?
Belgrano, buenos aires, 1984. En el marco de una familia de emprendedores. Mi familia encara todos los proyectos con mucho amor y mucha vocación por lo que hacen. Mi padre es quien me empujó hacia la gastronomía. Mi madre es una gran editora. Mi hermano tiene una galería de objetos de diseño en NYC y mi marido es productor y director de programas de gastronomía. Todos luchan todos los días por sacar adelante sus proyectos y eso se refleja en lo que hacemos.
Qué profesión ponés en los papeles de migraciones cuando viajás?
Empresaria. Siempre tuve conflictos con este tema porque nunca me supe definir por una profesión. Me recibí de directora de cine pero hice de todo. Dirigí videoclips, trabajé en diseño gráfico, pero rápidamente me enfoqué en el retail.
Cómo definirías tu trabajo?
Soy la directora creativa de Casa Cavia. También hice La Panaderia de Pablo Massey y Piso Tres en San Telmo. Como mi formación es en cine, yo pienso los espacios como decorados de película, en donde cada detalle compone un escenario en donde las historias suceden. Nuestro objetivo es que los invitados compartan sus historias de vida en Casa Cavia. A mi que me convocaron para convertir esta casa en un hogar, y para hacer eso, convoqué a distintas personalidades para que nos acompañen como anfitriones de la casa. De esa manera, cuando uno entrara a la casa, sentiría una cálida bienvenida por sus mismos anfitriones. El buen anfitrión recibe y cuida a sus invitados, se esmera en cada gesto hacia el otro y comparte lo que es suyo. Su eje rector es la satisfacción total de su huésped, sin importar el esfuerzo. Prepara la casa, diseña un menú, sabe recibir, atender, presentar y despedir. Cuando comencé a imaginar por quienes estaría compuesto este grupo decidí buscar los mejores en lo suyo: por ejemplo Ana Mosqueda, la dueña de la editorial Ampersand, armó la librería con libros que pueden llevarse para ser leídos en cualquier rincón de la casa. Luego, como cada casa tiene una mesa donde la gente se reúne a compartir sus alimentos, decidí convocar a Pablo Massey y su cocina tradicional Argentina, a Ines de Los Santos y su reversiones de clásicos de la coctelería y a Prospero Velazco, un maestro de la pattiserie. Pero a la casa le falta un ingrediente que le sumara calidez, y así pensé en la dulzura de Silvana Grosso con sus arreglos florales y en Julian Bedel con sus fragancias que le dan un toque de sofisticación al lugar. Ellos son quienes nos traen nuevas ideas y trabajan entre sí para crear de esa sinergía un espacio de sensaciones únicas.
Algo en Internet o redes sociales?
Mis website favoritos son:
https://www.nowness.com/
http://www.itsnicethat.com
http://www.wallpaper.com/
http://shop.gestalten.com/
http://www.freundevonfreunden.com/
Qué te hubiese gustado saber de tu profesión antes de comenzar a trabajar profesionalmente?
Lo que uno aprende día a día es a trabajar con gente, cada uno tiene su visión, sus emociones, su historia, y ser directora es, además de coordinar sus habilidades, manejar estados de ánimo.
Quiénes no podrían faltar en tu lista de invitados para la fiesta perfecta?
Los Freaks. En una fiesta siempre tiene que haber músicos, diseñadores, emprendedores, cineastas y artistas. Admiro la gente creativa, con talento y algo para comunicar al mundo.
La gente se sorprendería al saber que Casa Cavia …
Empezó como un proyecto para una editorial. Pero cuando empezó la transformación quisimos abrirla al público para que todos puedan disfrutar de esta casa maravillosa. Por eso el concepto parte de replicar las editoriales de principio de siglo donde no solo se producían libros, sino que eran un espacio de intercambio de ideas. Así la transformamos en un centro cultural que promueve el diálogo entre el espacio arquitectónico, la gastronomía, el diseño, el arte y los libros. Nuestra idea es durante el año armar una programación de actividades culturales para que la gente se lleve una nueva experiencia cada vez que viene. Entre las actividades hay un ciclo de cine al aire libre, presentaciones de libros, intervenciones de artistas (Luna Paiva y sus plantas) y hasta desfiles de moda.
El estudio de Casa Cavia.
El restaurant.
El jardín de Casa Cavia.
La librería.