Muchas veces, los lazos que unen a los cocineros son difíciles de describir en palabras. Un abrazo, una mesa compartida, un plato preparado de a dos, expresan lo que no se alcanza a explicar. Algo así es lo que une, hace varios años, a Mauro Colagreco y Massimo Bottura. Algunos dirán que las raíces italianas de ambos juegan a favor. Sin embargo, ese hilo supera las raíces, para expresar un deseo que ambos cocineros tienen y sienten: un mundo sin hambre, que reivindique el valor del alimento. Massimo y Mauro, con infancias separadas a miles de kilómetros de distancia, recibieron un mismo mensaje materno: la comida no se tira, la mesa se comparte y aquello que llega a la misma nutre cuerpo y alma.
Por esa razón, Mauro fue uno de los primeros convocados en el 2015 a colaborar con el Refettorio Ambrosiano, en Greco, Milán, un comedor donde se alimentaba a quienes no tenían hogar, bajo la consigna: nada se tira, todo es posible de reciclar.
Este año la experiencia se repite en Río de Janeiro, durante los Juegos Olímpicos. Mauro afirma: “no puedo dejar de colaborar con este movimiento, el de Refettorio Gastromotiva Río 2016, junto al equipo de Massimo Bottura y al de Gastromotiva, de David Hertz. Cocinaré en el comedor del barrio de Lapa, de Río de Janeiro, porque sigo pensando que el mundo debe alimentar a todos sus habitantes, con una cocina que permita a cada uno ejercer una vida digna. Quienes tenemos a cargo esta profesión, somos responsables de ayudar en esa dirección. Es un compromiso con el mundo en el que vivo y también en el que quiero que hereden mis hijos.”
Mauro Colagreco
Chef argentino, su restaurante Mirazur, en Menton, Costa Azul, Francia, que cumplió 10 años, ocupa el puesto 6to de The World´s 50 Best. Es el único restaurante de un chef sudamericano con dos estrellas Michelin. Hoy, además, Colagreco posee un espacio Paris, Grand Coeur, Carne, un espacio de hamburguesas gourmets en su ciudad natal, La Plata y el recientemente inaugurado Azur en Shangri-la, HotelBeijing, China. A su vez, en un año está prevista la apertura de su restaurante en el Aeropuerto de Niza, Francia. Es además, Embajador Gastronómico del HSBC y de la bodega Catena Zapata. Oriundo de La Plata, Mauro se formó con Beatriz Chomnalez y el Gato Dumas y luego partió a Francia, donde completó sus estudios en el Lycée Hotelier de La Rochelle. Cuando terminó su carrera, trabajó al lado de grandes como Bernard Loiseau, Alain Passard, Alain Ducasse y Guy Martin, punto inicial para Mirazur.
Mirazur