Sin dejar de lado la estructura, Felipe Oliveira Baptista promueve la fluidez y continúa desafiando las paradojas del “Chic Sportswear”.
La silueta es relajada y se entrega a la seducción del verano a medida que el cuerpo se desliza en largas y livianas capas. Ni la noche, ni la mañana. Pero ambas al mismo tiempo. El majestuoso largo de los vestidos y la indumentaria. Las líneas gráficas de los courts de tennis dibujan un trench o un abrigo de verano. Un vestido de cuello polo con rayas y transparencias. Faldas y Shorts de línea A. Las gafas de sol acompañan el vestuario. De marco redondo y en tonos marrón habana, cristal y nude. Los pies se visten con sandalias de gamuza natural con recortes ultrafinos alrededor del tobillo, generando extrema sensualidad. El detalle “chic”: la combinación del calzado sportswear con vestidos y pantalones de géneros nobles.