El legislador porteño Roy Cortina, autor de esta distinción, destacó la importancia de estas dos figuras de la gastronomía argentina: “En tiempos donde prima la inmediatez y muchas veces la desconexión con lo que consumimos, Narda rescata la cocina tradicional y el uso de ingredientes locales, de temporada con un abordaje de alimentación consciente. Damián, por su parte, también es un referente de una nueva generación de pasteleros con una impronta y un encanto personal que lo ha convertido en un personaje muy querido por todo el público. Ambos recorrieron distintos caminos hasta lograr el reconocimiento que hoy tienen por su amplia trayectoria”.