Encarnación absoluta de la feminidad, estrella de inteligencia intuitiva, ¿Sabía Marilyn que Mademoiselle Chanel había declarado en 1921 acerca del N°5: «Quiero un perfume de mujer con olor a mujer»? ¿Hay algo más natural que el icono de la sensualidad inocente hiciera suya la audaz fragancia?